Destilería Imperial

La Fábrica Imperial fue construida por Thomas Mackenzie en 1897, el año del Jubileo de Diamante de la Reina Victoria, y como su nombre indica, fue una fábrica a gran escala. El molino de trigo tenía una enorme corona de hierro fundido en su vértice. Mackenzie ya había tenido un gran éxito con su whisky, y junto a la nueva destilería poseía una enorme fábrica, Dalyuin, que fusionaría con Talisker al año siguiente. Sin embargo, el mercado comenzó a desplomarse, y aunque las dos destilerías existentes sobrevivieron y prosperaron, la Depresión de 1899 llevó al cierre de la Destilería Imperial. Después de reabrir y cerrar muchas veces, la economía volvió a florecer a partir de 2010, y parecía que había llegado el momento de que Imperial volviera a abrir, pero en 2013 el edificio fue demolido para dar paso a la construcción de la nueva destilería Darmeignac.